Todas las historias que tienen que ver con los campos de concentración nazis y las atrocidades que allí se produjeron resultan estremecedoras. Volvemos a asomarnos al horror, al genocidio, a la locura, a la muerte, a la degradación más humillante sufrida por millones de personas en el periodo más oscuro de la Historia. Toca adentrarse en Auschwitz acompañando a estas niñas, para vivir de primera mano su desgarradora historia. Porque no debemos olvidar, porque la memoria debe servir para que conozcamos todas las atrocidades que se hicieron, por eso y por lo impecable del montaje, todos deberíamos dejarnos llevar por este viaje. Un montaje que removerá conciencias, que encoje el alma, que te golpea con fuerza, que te conciencia sobre lo que es capaz de hacer el ser humano.
Existen lugares que resultan emocionantes desde el mismo momento de entrar. Lugares como fueron La pensión de las pulgas o La casa de la portera, en los que te adentras en espacio familiares, acogedores, cercanos, que te dejan expuesto para lo que tenga que venir sin la distancia que nos da el patio de butacas. La biblioteca del Teatro Soho Club Madrid nos recibe con su elegancia, sus estanterías llenas, su impoluta elegancia. Quedamos rendidos nada más entrar, ya nos han ganado, ahora toca sufrir las consecuencias de haber bajado los brazos. Y la realidad es que la historia que vamos a ver nos golpea con fuerza desde el primer instante, pese al tono festivo de los primero compases. Tras haber disfrutado de montajes de la misma temática como "El último tren a Treblinka", "Mauthausen" o la más cercana "J´attendrai", volvemos a descubrir una propuesta en torno a la barbarie nazi, que como sus predecesoras, no nos dejará indiferentes.
La compañía El Dado Teatro es la responsable de este conmovedor montaje, que nos lleva a uno de los lugares más abominables que haya creado el ser humano. Esta joven compañía se define como "un dado sin una de las caras, ya no es un dado. Por eso, y reforzando el trabajo en equipo, nace El Dado Teatro, quienes desde la dramaturgia, pasando por la interpretación y llegando al diseño de luces, se han unido para contar historias". Y este trabajo coral les está reportando grandes alegrías. El montaje ha sido premiado con el Premio Nacional de Teatro Joven Buero Vallejo 2021, Premio Autonómico Madrid Buero 2021 (con mención especial a la interpretación de sus jóvenes actrices) y el Premio en el festival Ana Frank de Buenos Aires.
El estremecedor texto de Pedro Martín Cedillo nos muestra la inocencia de estas cuatro niñas, con una deliciosa ternura que se ve truncada para tornarse en un compañerismo y una hermandad hermosas, por la imperiosa necesidad de hacer lo posible para sobrevivir. La narración comienza casi a modo de comedia, con un tono festivo por el orgullo de las chicas por su viaje en busca de un supuesto trabajo, pero pronto el relato cambiará de tono. El viaje en el tren, la llegada al campo y los primeros problemas hacen cambiar el sino de la historia y la actitud de las chicas, que van madurando al mismo tiempo que crece su miedo y su desesperación. Todo el relato gira en torno a la amistad entre las cuatro chicas, para mostrarnos las atrocidades de los campos de concentración y hacernos vivir casi en primera persona (el espacio de la Biblioteca del Teatro Soho Club Madrid ayuda a ello) la angustia y el miedo.
La dirección corre a cargo de Ricardo Goñi (con Claudia Massanet como ayudante de dirección) que hace un trabajo impecable en su estreno como director (había sido ayudante de dirección en la interesante "Los 7 franceses" que pudimos ver en el Teatro Lara, y codirigido "Deshojados" con P. Ramírez). Un montaje intenso y lleno de emociones, que el director sabe medir en cada momento para darle el tono y el ritmo adecuado en cada situación. Con un comienzo festivo de ritmo alocado, la crudeza del trayecto en tren frena el ritmo pero sube estrepitosamente la intensidad. El montaje no baja de intensidad en ningún momento, con escenas de gran belleza estética (como la ya nombrada del tren o la de la muerte de una de las chicas) y otras gran intensidad interpretativa debido a la contundencia del texto.
La historia nos traslada al pequeño pueblo de Humenné, en Eslovaquia, donde una maña de Marzo de 1942 la vida cambió para las chicas judías que allí vivían. Todas las mayores de 16 años fueron engañadas con la excusa de ir a trabajar como voluntarias contratadas a una fábrica de botas para soldados. Las niñas de Humenné acuden a la convocatoria con la ilusión de poder ayudar a sus familias mandando el dinero que supuestamente iban a cobrar. Lo que para ellas era una emocionante historia llena de sueños y esperanzas, no tardará en convertirse en una pesadilla de la que no todas saldrán. Ellas fueron las primeras, el primer convoy que llegó al campo de concentración de Auschwitz. Las primeras en llegar y las últimas en salir.
"Los hombres hacen las guerras, los hombres ganan las guerras y las mujeres sufren las guerras" (Heather Dune Macadam)
Cuatro niñas engañadas que sufren las mayores atrocidades que puede pensar la humanidad. Un angustioso viaje al infierno, una pesadilla que duró tres años y que algunas no consiguieron superar. Menos de un centenar de todas ellas consiguió salir de ese infierno, el resto dejó la vida tras las alambradas de Auschwitz. La inocencia de estas jóvenes fue aniquilada, su ilusión por un trabajo remunerado se convirtió en una realidad plagada de violencia, abusos, hambre, enfermedad y dolor. Una desgarradora historia que no por conocida deja de estremecernos. Una obra necesaria para que seamos conscientes de las barbaridades de las que son capaces los seres humanos.
Andrea Varas, Gloria Díaz, Julia Balserini y Miriam Escabias son las cuatro niñas con las que vivimos este estremecedor viaje. Unas jóvenes actrices que destilan vitalidad y energía, pero que también saben medir lo que nos deben dar en cada escena, pasando de la inocencia más conmovedora al dolor más extremo por la pérdida de un ser querido. Las cuatro son actrices y narradoras, niñas y mujeres, soñadoras y despojadas de su juventud. Las cuatro hablan, gritan, sufren, se mueven a distintas velocidades, se arrastran, nos confiesan sus miedos, lloran, se desmoronan, se van deconstruyendo ante nuestros ojos según avanza la historia. Contundentes y desgarradoras interpretaciones pese a la juventud de las cuatro actrices.
Con apenas unas cajas de madera con ruedas y un elemento que aparece como un monolito cubierto por sábanas, la escenografía se distribuye de forma aparentemente aleatoria por el espacio. Cuatro maletas nos dan la bienvenida al acceder a la sala, las mismas con las que las niñas afrontar el funesto viaje. Todo el viaje viene acompañado por canciones en hebreas y eslovaco que nos estremecen, con el doloroso sonido de un piano que marca el camino al horror. Por último, no podemos dejar de hablar del impecable diseño de luces de Trini León, capaz de crear un lúgubre y tenebroso espacio por el que se mueven las actrices.
En definitiva, estamos ante un montaje brillante desde la sencillez de la forma pero complejo en su contenido. Un trabajo preciso y contundente de la joven compañía El Dado Teatro, a los que habrá que tener muy en cuenta, ya que apuntan a grandes cosas. Les seguiremos la pista. Hay que recordar, para los rezagados, que en el mes de Marzo este montaje regresará al Umbral de Primavera, donde arrasó hace unos meses.
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Teatro: Teatro Soho Club Madrid. Biblioteca
Dirección: Plaza de España 6.
Fechas: Del 18 al 26 de Febrero. Viernes y Sábados a las 19:00.
Entradas: Desde 16€ en teatrosohoclub.
Ficha Artística
Autor: Pedro Martín Cedillo. Dirección de escena: Ricardo Goñi.
Ayudante de dirección: Claudia Massanet. Produce: Andrea Durán
Interpretes; Andrea Varas, Gloria Díaz, Julia Balserini, Miriam Escabias
Diseño de luces: Trini León
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