Una imagen que funciona, el poder de lo femenino al
servicio de la escena.
Sólo dos días han estado estas valencianas en la céntrica sala madrileña La Cuarta Pared, en el VI ciclo de danza MoverMadrid. Y eso que nosotras nos hubiéramos ido con ellas de gira por donde fuera.
Un aplauso generosos, de un público bien atento y entregado, suena al terminar la pieza, y es que estas mujeres nos han cautivado con su propuesta escénica, su sencillez y honestidad de la artesana que sabe lo que hace, y lo hace bien, porque esa es la sensación que nos llevamos, lo que está bien hecho y bien contado, con talento pero también con trabajo.