Teatro: El beso de la mujer araña. Teatro Bellas Artes.

«El beso de la mujer araña», que podemos ver desde esta semana en Madrid, es una versión de la tan versionada y aclamada obra del escritor argentino  Manuel Puig, adaptada al teatro por Diego Sabanés y dirigida por Carlota Ferrer.

 

 

 

Esta historia nos habla sobre las relaciones humanas, la dominación de unos frente a otros, de libertad, de identidad, de coacción.

 

En una cárcel Valentín Arregui y Molina son compañeros de celda. El primero es un preso por subversión, es decir, que este hombre piensa que puede cambiar el país con las armas y es un idealista en el campo de lo social, pues piensa que el país tiene esperanza si todos se unen a luchar por el pueblo. Además, menciona varias veces que para él la revolución está antes que los sentimientos. Estudia muchos libros, sospecha de todo lo que pasa en la penitenciaría y no le gustan las bromas sexuales.

 

Molina, de más edad, es una mujer en el cuerpo de un hombre que fue acusado de corrupción de menores. Sentimental y contador de películas, llenas de detalles y donde quiere ser la sufrida heroína. Preocupado por la salud de su madre que es lo único que tiene cuando salda de allí.

 

 

La película contada por Molina, que se va contando como las Mil y una Noches, todas las noches un pedazo, se convierte en el hilo conductor que sumerge a los personajes en una transformación.

 

Con el transcurrir de los minutos los personajes comienzan a revelar y ventilar su interior. Dan vía libre a los conflictos personales, sus frustraciones, el amor y un sinfín de temas que componen la condición humana.

 

Valentín acaba sucumbiendo a los cuidados de Molina, que lo acoge como a un niño, lo cuida y lo mima y lo alimenta. Descubrimos que Molina consigue la comida delatando al joven (sin decir nada) ante las autoridades de la cárcel y Molina empieza a tener un poco de conciencia política, más por ser esa heroína que por convicción. Y que al final le llevará a un final trágico.

 

 

La idea del amor en la obra es también la idea de fusión, que se completa con la unión sexual, la de los cuerpos que es el clímax de la obra.:

 

– Ahora sin querer me llevé la mano a mi ceja, buscándome el lunar. – ¿Qué lunar?... Yo tengo un lunar, no tu – Sí, ya sé. Pero me llevé la mano a mi ceja, para tocarme el lunar…, que no tengo. – … – A ti te queda tan lindo, lástima que no te lo pueda ver. – ¿Y sabés qué otra cosa sentí, Valentín? Pero por un minuto, nada más – ¿Qué? Hablá, pero quédate así, quieto… – Por un minuto sólo, me pareció que yo no estaba aquí, ...ni aquí, ni fuera… – … – Me pareció que yo no estaba… que estabas sólo tú. – … – O que yo no era yo. Que ahora yo… eras tú.

 

La interpretación es impecable, Igor Yera tiene varios momentos en solitario donde el movimiento del cuerpo nos indica esa desazón que no le deja en paz y las torturas a las que es sometido. Por momentos casi violento otras amable, sensible, consigue una labor escénica que no desentona con Eusebio Poncela que está espectacular en el papel de Molina. La sensibilidad y la dulzura de movimientos que nos brinda en la obra es magnífica.

 

 

 

Adaptar un texto de Manuel Puig no es una tarea fácil, menos hacerlo a través de un texto emblemático del autor; a eso hay que sumarle que, "El beso de la mujer araña", ya tuvo varias interpretaciones, incluso en el cine.

 

Esta versión me ha llamado llamó mucho la atención, dirigida por una directora que tiene una trayectoria brillante en el mundo del teatro, utiliza la danza, luces estroboscópicas y las imágenes proyectadas en las paredes para ayudar al relato junto con una jaula que tienen dos pájaros como metáfora de la falta de libertad.

 

Podemos apuntar, por decir algo, que la obra desarrolla la relación de los personajes durante casi toda la duración y que el clímax y el desenlace se hace en el último momento. No sabemos si porque se quiere hacer así o porque no se ha sabido sintetizar. En cualquier caso este hecho no desmerece para nada la obra que es muy recomendable.

RESEÑA ESCRITA POR GEMA COLADO

 

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Teatro: Teatro Bellas Artes.

Dirección: C/ Marqués de Casa Riera, 2.

Fechas: Desde el 7 de septiembre.

            Martes a viernes a las 20:00h
            Sábados y domingos a las 19:00h

Precio: Platea: de 23,00€ a 28,00€
           Anfiteatro: de 17,00€ a 24,00€
           Precios reducidos los martes y miércoles.  

 

Ficha artística:

Autor: Manuel Puig.
Dirección: Carlota Ferrer.
Ayudante de dirección: Manuel Tejera.
Versión: Diego Sabanés.
Diseño de escenografía: Eduardo Moreno.
Diseño de iluminación: David Picazo.
Diseño de vestuario: Carlota Ferrer.
Diseño gráfico: María La Cartelera.
Espacio sonoro: Tagore González.
Productor: Jesús Cimarro.

Una producción de Pentación Espectáculos.

Reparto

Eusebio Poncela.
Igor Yebra.