La sala
pequeña del Teatro Español de la mano de la adaptación realizada por Yolanda
Pallín y la dirección de Laura Garmo, rescata a una de las escritoras más
célebre de los años 50 del siglo pasado, Carmen Kurtz. Con esta versión de El
desconocido obra con la que obtuvo el premio Planeta en 1956, cuando todavía
era un premio literario.
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La obra
se inicia en un puerto donde una familia espera ansiosa la vuelta a casa de su
hijo, una vuelta a casa que no acaba de producirse, una vuelta a casa que se ve
interrumpida por cartas, noticias en los periódicos….un vuelta a casa que
parece que no va a suceder nunca.
Nos
encontramos en la Barcelona de posguerra, alrededor de los años 50 donde como
decíamos una familia espera, después de muchos años de ausencia la vuelta a
casa de Antonio quien, una vez terminada la guerra civil española, de la noche
a la mañana decide alistarse en la División Azul para luchar junto a los nazis
en la segunda guerra mundial contra Rusia.
"Penélope aprisa, levántate pronto para con tus ojos lo que anhelabas"
Antes
de partir hacia el frente Antonio se casa con Dominica, una chica jovial y
despierta que durante doce años espera pacientemente el regreso de su marido.
Un regreso que finalmente se produce cuando este vuelve a bordo del Semíramis
con otros soldados supervivientes de la guerra y de los campos de concentración
rusos.
Aunque
Antonio ha vuelto parte de él se ha quedado en el frente. Las duras condiciones
tanto del frente como de los campos rusos donde el hambre y el frío son
extremos cambian mucho al protagonista. El Antonio que se fue hace doce años es
muy distinto al que ha vuelto ahora.
"No eres Antonio, eres un desconocido"
A lo
largo de toda la representación se van proyectando en el fondo del escenario fragmentos
de distintos cánticos de la Odisea. Planteando paralelismos entre las
peripecias de Penélope y Ulises con Antonio y Dominica. Una Dominica que cuando
ya había perdido la esperanza de volver a ver a su marido finalmente consigue
ser testigo de ese reencuentro.
Pero
las expectativas rara vez se cumplen y nada de lo que sucede es como se esperaba.
El paso del tiempo unido a las traumáticas experiencias que Antonio vivió en el
frente y estando prisionero, les ha convertido en dos desconocidos. Por mucho
esfuerzo que hace Dominica para intentar que las cosas vuelvan a ser como
antes, no recibe otra cosa que la ignorancia y la desconsideración por parte de
Antonio. La ilusión y alegría que tenían por encontrarse cada día han desaparecido;
los sueños se han desvanecido y ya ninguno disimula la falta de ganas por
satisfacer y hacer la vida más fácil al otro. De hecho parece que en el caso de
Antonio, todo esto ya era previo a su marcha al frente, hasta el punto de
intuir que la decisión repentina de alistarse fue motivada por que ya no
aguantaba esa situación.
"Nadie puede saber la decepción que me producen los que me rodean"
Mientras
asistimos a la vuelta de Antonio que, no es el mimo hombre que se marchó, un
Antonio que ha vuelto sumergido en dudas, miedos e inseguridades y que está más
unido y pasa más tiempo con Germán un amigo y compañero de fatigas en la guerra
y en el campo de concentración que con su mujer, vemos la transformación que
también ha sufrido Dominica quien ha superado la larga ausencia de su marido
creando su propia identidad y su propio sentido a su vida.
A pesar
del germen de la obra -el enrolamiento en la División azul por parte de Antonio-
lo cierto es que la cuestión política pasa de puntillas a lo largo de toda la
representación. Se centra en el papel de Dominica y de todas las mujeres de esa
época. Unas mujeres a las que sus maridos, sus familias y por extensión la
sociedad las anulaba, las silenciaba y las reprimía.
" No es fácil ser la esposa de un mártir"
La
estructura de la obra más que lineal viene a ser una sucesión de escenas con
saltos en el tiempo que configuran un todo y que ayuda a entender el antes y el
después. Estableciendo como decía anteriormente puntos de conexión con el
Ulises de Homero y su Odisea.
La
estructura temporal de la obra es flexible: no se limita a un flashback lineal,
sino que hay saltos, evocaciones, momentos que sugieren más que explican,
reforzando que la memoria no es exacta, el pasado no es un lugar al que volver
con determinadas certezas.
" Es más meritorio fingir que decir la verdad"
Carmen
Kurtz la autora del libro, nació en Barcelona en 1911. Firmaba con el apellido
del que fue su marido Pedro Kurtz, alcanzó mucha popularidad en los años 50 y
60 con libros infantiles y juveniles, hasta el punto de obtener varios premios
literarios. Pero destacó fundamentalmente por su defensa del papel de la mujer
en la sociedad de posguerra.
La
adaptación del texto es obra de Yolanda Pallín, dramaturga con una extensa carrera tanto con
textos propios como adaptaciones. La dirección corre a cargo de Laura Garmo,
dramaturga y directora de escena. Impecable el trabajo de ambas dada la
dificultad que supone la adaptación de una novela al teatro, el resultado es sobresaliente.
" La sinrazón convierte a dos amantes en dos desconocidos"
En
cuanto a la autora del texto original, Laura indica que, Carmen Kurtz tiene
que ser rehabilitada, reconocida y colocada en el lugar que debería
haber ocupado en la historia de la literatura española. Es verdad que hay otras
mujeres como Luisa Carné, Josefina Aldecoa, Carmen Martín Gaite, Merçè
Rodoreda, Concha Los, Dolores Medio, pero casi todas ellas tienen
más prensa y más crítica que Carmen Kurtz, una novelista, que vivió
del 1911 al 1999, con una carrera con cambios, pues en su última etapa
narrativa se dedicó a la literatura para jóvenes, y esto nos parecía
absolutamente injusto".
Y
señala: "Estamos aquí no sólo para rehabilitarla, sino porque “El
desconocido” es un material textual de primer orden, y una novela
que, sin duda, encierra una estupenda obra de teatro. Evidentemente
la labor del adaptador de una novela estupenda, es arduo porque hay
que renunciar. Hay que saber eliminar todo aquello que le sobre a la piedra
para convertirse en figura con los requisitos para estar encima de un
escenario. En el caso de Carmen Kurtz, tenemos algunas características que
lo hacen muy fácil".
"Sufro tanto y un suave sopor ha logrado rendirme"
Magnífica
la escenografía a cargo de Blanca Añón, que ha optado por un minimalismo
que ayuda a la perfección a acercarnos a los distintos espacios donde se desarrolla
la historia. La casa de los padres de Antonio, el bar, la tienda de Germán, la
casa de Dominica y Antonio, y lo que más me gustó la playa y el mar azul.
Maravilloso
el trabajo tanto de Pilar Valdelvira con la iluminación como de Benigno
Moreno con el sonido y la música original. Brillante Mónica
Teijeiro con el vestuario que nos traslada fielmente a la España de
posguerra.
"El hombre es tan fuerte que huye del paladar para alojarse en el vientre"
El
elenco está formado por Toni Agustí, que da vida a Antonio. Un personaje
que se alista en la División Azul con la intención de encontrarse y lejos de
ello se pierde. Un hombre que en una época de penurias y calamidades lo tenía
todo para ser feliz y llevar una vida cómoda (su padre tenía un despacho de
abogados que al amparo de la situación del país, le iba muy bien). Pero parece
que una vez de vuelta su único interés está en su amigo Germán e intentar que
este cumpla sus sueños.
Le
acompaña Ángela Boix, magnífico su papel como Dominica, que vive entre
el recuerdo de lo que era su vida con Antonio y su realidad actual. Pasa su
tiempo entre ayudar a Germán con la tienda y lidiar con su cuñado que está enamorado
de ella. Da muestras de enorme versatilidad y de un gran dominio de la
expresión corporal sobre todo en las escenas que suponen saltos en el tiempo.
Completan
el reparto con un gran trabajo de todos ellos, Elena González, Mariano Llorente,
Victor Antona y Paco Flores.
El Teatro Español nos brinda una maravillosa oportunidad de descubrir a una de las mejores escritoras de mediados del siglo pasado, y a la vez rescatar del ostracismo a tantas y tantas mujeres que fueron silenciadas y condenadas al ostracismo.
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Teatro: Teatro Español. Sala Margarita
Xirgu
Dirección: Plaza de Santa Ana C/ Príncipe,
25.
Fechas: Del 14 de noviembre al 23 de
diciembre.
Martes a domingo a las 19.30 horas.
Entradas: 18 €.
Ficha artística y técnica.
De Carmen
Kurtz.
Dirección: Laura
Garmo.
Adaptación: Yolanda
Pallín.
Reparto:
Dominica: Ángela
Boix.
Antonio: Toni
Agustí.
Madre/Médica: Elena
González.
Padre/Florencio: Mariano
Llorente.
Germán: Víctor
Antona.
Enrique/Dependiente: Paco
Flores.
Escenografía: Blanca Añón.
Vestuario: Mónica
Teijeiro.
Iluminación: Pilar
Valdelvira.
Sonido y
Música original: Benigno Moreno.
Caracterización: Moisés
Echevarría.
Ayudante de
dirección: Coral Ros.
Ayudante de
escenografía: Lidia Gómez.
Ayudante de
vestuario: Freya Medrano.
Residente de
ayudantía de dirección: Giulia De Crescenzo.
Asistente artístico: Paul Alcaide.
Producción: Teatro Español.
