No soy tu gitana en Teatro del Barrio

 



No soy tu gitana, aire de realidad frente a nosotras. Ropa tendida, unas pinzas, y lo que será un bello juego de cuerdas que se cruzan, entrecruzan, cuerdas que pueden ser soga, pueden ser red ó tela de araña. Cuerdas de tendedero, de tópicos y prejuicios pero también son cuerdas que soportan ropa limpia, arraigo y hogar. Y llega ella, Silvia Agüero, campechana, didáctica, de andar por casa. 


No sabíamos lo que íbamos a encontrar, nunca lo habíamos pensado, desconocíamos totalmente la historia del pueblo gitano, no aparece en los libros de historia, pero por nosotros mismos, no nos habíamos acercado a conocer la resistencia y la lucha de un pueblo en defensa de su cultura y su lengua. La dignidad, la unión frente a leyes criminales, frente a todo elemento en contra. Mientras tanto allí estaba Silvia, sin excesos, contando, cantando, tendiendo, resolviendo y haciéndonos reflexionar sin atisbo de pedantería, sin dolor. Desde la serenidad que da un carácter potente y transformador.

Silvia Agüero y Nül García en la dramaturgia, construyen un texto potente, cercano, entendible y riguroso, en la dirección Nüll García y Pamela Palenciano en el trabajo actoral componen una pieza necesaria, un monólogo que exhala, verdad, respeto y justicia por las que ya no están, por aquellas que fueron invisibilizadas, silenciadas y que aun así resistieron ante prejuicios y tópicos . Que condicionaban su persona y su vida. Que las hacía, que las hace daño. Un antigitanismo que lleva dentro  de nosotros 600 años, racismo dominante,  machista, patriarcal marcado a fuego en las entrañas del sistema y así de nuestro ser.   

Silvia Agüero ha decidido subirse a las tablas y contarlo, un grito sonoro, un modo valiente una nueva forma de contar la historia de un pueblo. Silvia forma parte de la Asociación Pretendemos gitanizar el mundo, mediante talleres, libros sobre la historia de las mujeres gitanas, el análisis de las bases en la que se asienta este antirracismo, derribando muros, construyendo puentes.

Su historia, es la nuestra como opresores, poniendo de nuestra parte para que no se derriben muros. En su humor, a veces sentimos vergüenza y empezamos a entender y a deconstruir conceptos, a mirar y recolocar las gafas. 

En su recuerdo, lleno de rabia  llena el escenario, nos hace reflexionar y aprendemos de mujeres de las que nunca escuchamos su nombre, historias que nunca fueron contadas. Vergüenza, porque alardeamos a veces de formar parte de la alternativa, de conocer aquello por lo que otros no sienten interés. Y aquí estamos, ávidos por escuchar, con el deseo de que esta clase magistral no finalice, que nunca nos despertó interés y sobre todo nos preguntamos ¿Por qué motivo?.

La mujer gitana como construcción, en la memoria colectiva subconsciente, sin conocerlas, sin saber absolutamente nada sobre ellas, y pensar que nosotros somos parte, quizá no asintamos, pero si callamos; “inmorales, flojas, que no cuidan bien  a los niños, que son ladronas , que son indignas”  pero señores , señoras piénsenlo y ¿ustedes qué saben, qué sabemos?. Silvia reitera, una mentira repetida durante seiscientos años, no se vuelve verdad.

Silvia nos cuenta que los reyes católicos fueron los primeros que comenzaron las leyes antigitanas que perseguían la desaparición del Pueblo Gitano como cultura, frente al mestizaje y la convivencia que venía existiendo entre payos y gitanos.  Durante la historia, hasta 260 leyes antigitanas que hablaban de destierros y muerte. La Gran Redada, el mayor intento de exterminio que también fue invisibilizado. 

Pero aun no ha terminado este racismo institucional. ¿Cómo son tratados en la administración, en la sanidad pública, en un museo, en un comercio, en una escuela? ¿se lo habían preguntando?. Agüero continúa haciéndonos cómplices de esta realidad, nos habla de la cultura gitana, y nos regala esbozos de romaní, como si charlásemos en una tertulia con las amigas en un café. En su mirada humildad, y ante nuestra vergüenza parece existir en esta pieza un subtexto “no te culpes, que no eres tu, es el sistema, pero desde ahora caminemos juntas”.

Un monólogo, una ventana que deja ver el horizonte de mujeres libres e iguales.


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No soy tu gitana
Dirección: Calle Zurita,20
Fechas: . Hasta el 29 de mayo
Entradas: 12€  Web de Teatro del Barrio


Ficha artística

Intérprete: Silvia Agüero

Dramaturgia: Silvia Agüero y Nüll García

Dirección: Nüll García

Trabajo actoral: Pamela Palenciano 

Consultoría y traducción: Nicolás Jiménez

Diseño de escenografía: Aylin Vera Ramos (Sawustudio)

Diseño de Iluminación: Beatriz Franco

Diseño de Vestuario: Almudena Bautista

Producción artística: Ana Belén Santiago

Producción ejecutiva: Lucía Rico

Dirección técnica: Antonio Sánchez

Comunicación: Paloma Fidalgo

Fotografía: Laura Ortega

Video promocional: Mi moto alpina

Diseño de cartel: Jacobo Gavira

Una producción de Teatro del Barrio en colaboración con Pretendemos Gitanizar el Mundo.

 

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