Hasta
el día 11 de mayo la Sala Max Aub de Nave 10 en Matadero nos brinda la
posibilidad de disfrutar de Vendrán los alienígenas y tendrán tus ojos; el
último y esperado montaje de María Velasco Premio Nacional de Literatura
Dramática 2024 por Primera sangre. Un título tan original como la
propia obra.
* * * * * * *
Creo
que ya lo he comentado alguna que otra vez, pero tengo interiorizados una serie
de recursos teatrales que siempre me gustan cuando me encuentro con ellos. Y
esta ha sido una de ellas. Llegar a la sala y que uno o varios de los
protagonistas estén ya sobre el escenario es como si te estuviera esperando.
En este
caso una mujer está en su cama descansando, como solemos hacer casi todos
cuando nos despertamos por la mañana y no tenemos excesiva prisa por salir de
la cama. Parece como si no tuviera motivos para levantarse.
Esa
mujer se encuentra ante una doble dificultad por un lado se enfrenta a la
terrible crisis de los cuarenta y por otro ha de afrontar el desamor ante su
última ruptura.
"Tenía que aprender a hacerlo todo sola, como un bebé"
Como hace
mucha gente hoy en día, acude a una aplicación de citas, en poco tiempo ha de
empezar a familiarizarse con nuevas expresiones sexting, goshting…. Para esta
persona supone un volver a empezar, volver a intentarlo otra vez con lo que
lleva de mezcla de ilusión y pereza a partes iguales. Con la misma ilusión e
incertidumbre, pero también con los mismos miedos. Intentando lidiar entre ser
una mujer de su tiempo autónoma e independiente con “la amenaza” de la soledad.
Sin
embargo en esta ocasión es otra persona, con más experiencia en el amor aunque
sea a costa de sufrir cuando la cosa sale mal, algo que le hace ser pesimista
sobre las posibilidades de volver a encontrar el amor.
"Preferiría vivir sin utopía por que puede hacerse realidad"
Recorremos
con ella ese duelo que irremediablemente toda ruptura ha de pasar. Un paseo por
los recuerdos, por los planes que podían haber sido y no fueron, por los
momentos.
A lo
largo de algo más de una hora la acompañamos en un viaje de introspección, un
viaje donde su equipaje es la duda, el miedo y la incertidumbre. Un viaje que
acaba llegando al espacio exterior, de donde viene su nuevo amor, una original
simbología que encontrar el amor verdadero es como ver un ovni.
"Los anglicismos nos protegen de la realidad"
La obra
es la montaña rusa de los sentimientos encontrados que todo lo acontecido le ha
provocado. El amor, la ruptura, el deseo, la rutina, la pasión, los fantasmas
de relaciones pasadas. El viaje a su niñez y a su adolescencia. Una etapa
marcada por su padre que le recordaba que “no volviera a enamorarse por lo
menos hasta los 40”.
La obra
se desarrolla entre reflexiones de la protagonista, reflexiones de lo más
dispar, el capitalismo, el genocidio en Palestina, la política, la guerra de
Ucrania, la pornografía…Unas reflexiones cuyo trasfondo es el sentido de la
vida y el amor.
José
Novoa
es el responsable de la original escenografía, compuesta por varios espacios.
Un escenario a la izquierda, una habitación con una gran cama en el centro y un
cuidado invernadero a la derecha. La cuidada iluminación es obra de Pilar
Valdelvira y Tagore González el encargado del sonido y la
composición de la música original.
"¿Qué da mas miedo perder la distancia que nos separa o mantenerla?"
Sin
duda una de las cosas que más me gustó fueron las distintas creaciones coreográficas
de Josefina Gorostiza, impecable su trabajo.
Muy
curioso el trabajo de Albert Coma con la videoescena (divertidísimo
el momento del Ecce Homo). En cuanto al vestuario es obra de la propia María Velasco.
Por último me gustaría destacar a Sarai Núñez y Amador Rehak
autores tanto de la máscara de alienígena como del casco de astronauta.
"La fe es tan improbable como el amor"
Como ya
he indicado la dramaturgia y la dirección son de María Velasco. Doctora en
Comunicación Audiovisual por la Universidad Complutense de Madrid y estudió
dramaturgia en la Real Escuela Superior de Arte Dramático; además Máster en
Práctica Escénica y Cultura Visual. Con una dilatada carrera a sus espaldas a
pesar de su juventud. En 2019 nos regaló la maravillosa Talaré a los
hombres de sobre la faz de la tierra y ya el año pasado recibió el
Premio Nacional de Literatura Dramática por la obra Primera sangre, donde
aborda la violencia sexual en las niñas. Estrenada en el Teatro Valle-Inclán de Madrid con gran éxito
de crítica y público.
Perfecto
el ritmo que da a la obra en cada momento y vuelvo a incidir en ello,
maravillosos los números musicales con unas canciones míticas y unas coreografías
tan complicadas de ejecutar como visualmente preciosas.
"La distancia que nos separa son cinco abismos"
Respecto
a Vendrán los alienígenas y tendrán tus ojos señala que “la obra
parte del amor, un tema marginado, relegado a la vida íntima cuando tiene mucho
que ver con lo pro político”; y continúa señalando “Me interesa la
utopía y la ciencia ficción que es el realismo de una realidad más grande."
En
cuanto al elenco lo forman Maricel Álvarez y Carlos Beluga. Maricel está
desde el primer momento volcada en la obra (antes incluso de que comience) se
mueve con enorme comodidad por la montaña rusa de sentimientos por la que la
historia de amor y desamor la lleva. Enorme la complicidad y la química que
desprende con su compañero de reparto, Carlos Beluga cuyo trabajo es
sencillamente extraordinario. Como decía un poco antes de lo mejor sin duda los
bailes que se marca tanto en solitario como en perfecta armonía con Maricel. Qué
manera de controlar ambos la expresión corporal, nos dejan sin palabras. Junto a
todo esto toca la guitarra, canta con una voz espectacular, tremenda muestra de
su versatilidad.
No me
perdería la oportunidad de disfrutar de este original y divertido montaje.
* * * * * * *
Teatro: Nave 10 Matadero. Sala Max Aub.
Dirección: Paseo de la Chopera, 14.
Fechas: Del 25 de abril al 11 de mayo.
Martes a domingo a las 19.30 horas.
Horario especial San Isidro:
Viernes 9, sábado 10 y domingo 11 de
mayo / 18:30h.
Entradas: 21 €.
Ficha artística
TEXTO Y DIRECCIÓN: María
Velasco.
CON Maricel Álvarez y Carlos
Beluga.
DISEÑO DE ESPACIO ESCÉNICO: José
Novoa.
DISEÑO DE VESTUARIO: María
Velasco.
DISEÑO DE VIDEOESCENA: Albert
Coma.
ESCULTURA – FX: Sarai Núñez Fx
Estudio (casco astronauta) y Amador Rehak (máscara alienígena).
AYUDANTE DE DIRECCIÓN: Ruth
Rubio.
AGRADECIMIENTOS: Sara Rey
Camacho, Jairo Sánchez Yuste, Didier Otaola .
UNA PRODUCCIÓN DE Nave 10
Matadero y Pecado de Hybris (Ana Carrera y María Velasco)
CON LA PARTICIPACIÓN ESPECIAL
DE Giancarlo Pia Mangione (voz eccehomo) y Lucas Sánchez
(niño) .
DISEÑO DE ILUMINACIÓN: Pilar
Valdelvira.
DISEÑO DE SONIDO Y COMPOSICIÓN
DE MÚSICA ORIGINAL: Tagore González .
COREOGRAFÍA: Josefina
Gorostiza.
ASISTENTE ARTÍSTICO: Cristina
Simón Alcaine.
PRODUCCIÓN (PECADO DE HYBRIS): Ana
Carrera.
CON EL APOYO DE Goethe-Institut
Madrid y SIMEI.