La nueva propuesta que nos trae la Sala El Umbral de Primavera viene de la mano de la Compañía Kura Sana y trae por título “Una absurda explosión de Maravillosa Belleza”.
Ambientada 7.153 años
tras la extinción humana, 'Una absurda explosión de maravillosa belleza' es
"una hilarante búsqueda de respuestas en la que el tiempo hasta el colapso
planetario corre en contra", explica la compañía sobre un montaje en el
que tres robots basureros rescatan un misterioso paquete, con una bebé humana
en su interior. Este descubrimiento pondrá en jaque el eficiente funcionamiento
de la sociedad robótica.
Esta compañía independiente se lanza este año a su siguiente producción tras el éxito obtenido en la escena off madrileña el año pasado y lo hace con esta ácida sátira del mundo moderno.
Tras una década actuando
juntos en el grupo de teatro universitario 'No damos crédito', de la Facultad
de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), los integrantes de la
compañía Kura Sana se embarcaron en 2022 en
nuevos proyectos para dar salida a unas creaciones más arriesgadas.
Con una sala llena, con
las funciones de este mes de mayo agotadas y la obra prorrogada para el mes de
junio en esta misma sala se pueden hacer una idea de la propuesta tan potente que nos muestra este
grupo sobre las tablas.
El dramaturgo
Álvaro Revuelta firma esta comedia tierna y con el humor como hilo conductor
nos transporta al futuro al que está abocada la humanidad. Una sociedad que
sólo busca la utilidad de las cosas olvidándose de la belleza de lo inútil.
Con una frase
de Nuccio Ordine de su Manifiesto "La utilidad de lo inútil" nos da pistas de
la historia: “La búsqueda obsesiva de lo útil ha acabado por convertir en inútil
a la vida misma”.
La obra
comienza con una presentadora entusiasmada, que retrasmitiendo en 1986 el
accidente del transbordador espacial Challenger que se desintegró 73 segundos
tras el lanzamiento, termina su locución con el título de la obra.
Más tarde
aparecen nuestros robots (Manivela, Bombilla y Yunque) que se encargan de la
Clasificación de Residuos y cuya misión es clasificar y destruir los robots
defectuosos (aquellos que ya no cumplen la misión para la que están
encomendados) y acompañados de una tostadora.
Con un trabajo
cronometrado, útil, riguroso y que no deja lugar a la espontaneidad nos dicen
que a la tierra la quedan seis años para su destrucción. En esta distopía
futurista, la aburrida vida de nuestros basureros se ve alterada con la
aparición de un residuo en forma de bebe
humano.
Recordando a películas de los noventa como "Tres solteros y un biberón", nuestros robots se
vuelven más tiernos y amorosos con esta bebe intrusa que les recuerdan una
parte olvidada que no saben identificar.
Pasados seis
años y quedando menos para el fin de la tierra, nuestra bebe intrusa es
detenida por las fuerzas de seguridad (Sustancia y Sustrato) y nuestros maravillosos robots van en su busca
generando una serie de situaciones hilarantes y maravillosas que hacen las
delicias de los espectadores.
Esta brillante
puesta en escena nos muestra momentos geniales con robots defectuosos que se
salvan de la destrucción y que se convierten en guerrilla, humanos que buscan escaparse
antes del fin del mundo y todos ellos buscando el porque y el para que de las
cosas.
A partir de
allí se sustenta la idea de que si sólo perseguimos la idea del beneficio, de
la utilidad de los seres ya sean robots o los humanos extintos, sólo seremos
capaces de generar una sociedad enferma y sin memoria que perdida acabará olvidando
el sentido de la vida y lo bonito que son los pájaros y la tarea de hacer más
humana la humanidad.
La escenografía,
aunque sencilla, es bastante funcional y se va cambiando según la escena a
presentar. Mención especial a la iluminación tanto de los actores como a los artefactos de Bombilla y el robot
Enciclopedia donde sonido y movimiento van en
un baile simétrico y perfecto.
Viendo la obra
se ve que el año que ha costado ponerla en píe conlleva un trabajo minucioso, aunque
el juego actoral ha tenido que ser muy divertido y el proceso de creación ,con
esos diálogos brillantes y esos movimientos robóticos ha sido muy concienzudo.
Siempre
recomiendo ir al teatro pero en este caso es obligado. El trabajo de los
actores es sobresaliente (todos sin excepción y ninguno más que otro), los
diálogos aunque cómicos son dignos de analizarlos en profundidad, y todo ello
con una variante de humor inteligente que hace que la obra se pase volando y
que nos traslada a nuestros referentes R2-D2
y C-3PO.
Recuerdo de
nuevo que las entradas para mayo están agotadas pero las de junio ya se pueden
adquirir y dar las gracias a la sala El Umbral de Primavera por apostar por el
teatro independiente.
RESEÑA ESCRITA POR GEMA COLADO
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FICHA ARTÍSTICA
Elenco: Lucas Lerín, Irene Revuelta, Santiago Alonso, Alejandro Estrada, Jaime Martínez de Velasco, Alejandro Esteban, Belén Matey, Marina Lavara, Paula Guisasola, Sebastián Merlano, Lola Adroher, Maher Chichakli, Lucía Panadero, Clara Fernández, Emilio Cruz, Ana Jalibra.
Autoría: Álvaro Revuelta
Dirección: Álvaro Revuelta y Alejandro Estrada
Vestuario: Irene Revuelta y Lola Adroher.
Música: Sebastian Merlano
Escenografía: Paula Guisasola, Lola Adroher, Irene Revuelta, Lucía Panadero, Jaime Villanueva.
Dossier: Mingo Delgado
Coreógrafa: Belén Matey
Iluminación: Lucía Panadero, Maher Chichakli, Emilio Cruz
Sonido: Lucas Lerín, Santiago Alonso.
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