El
Teatro de la Comedia nos presenta la que es considerada como la obra de enredo
más perfecta del siglo de oro español. Se trata de Don Gil de las calzas verdes
de Tirso de Molina. Sarah Kane dirige a la Joven Compañía Nacional de Teatro
Clásico, en una versión de Brenda Escobedo y la propia Kane.
La sexta promoción de la Joven Compañía de
Teatro Clásico – fuente inagotable de talento por donde han pasado los mejores
actores y actrices del panorama teatral actual- presenta en el Teatro de la
Comedia una de las principales obras de Tirso de Molina, Don Gil de las calzas
verdes.
Estrenada en Toledo en el Mesón de la Fruta en
1615 sigue siendo considerada una de las obras más relevantes del teatro
barroco español.
A pesar de ser una de las obras más famosas del
siglo de oro lo cierto es que no la había visto nunca. Las referencias que
tenía de ella era que se trataba de una comedia de enredo y he de decir que
después de disfrutar de la representación he de decir que esta vez las
referencias eran muy exactas, por que efectivamente es una comedia de enredo,
de mucho enredo. De hecho hubo algún momento en que me perdía entre los
personajes. Más concretamente con el protagonista Don Gil. El hecho de que
hasta tres actrices asuman su papel en distintos momentos de la obra, puede dar
un poco pie a confusión. Confusión lógica en una trama marcada por el juego de
personajes, el cambio de identidades, los amores intensos todo ello aderezado
con un humor sencillo a la vez que magistral.
La
historia se inicia cuando Don Martín tras abandonar en Valladolid a doña Juana
su prometida, huye a esconderse en la Corte y para ello asume la falsa
identidad de Don Gil de Albornoz. Sus intenciones nada más llegar se fijan doña
Inés, una dama más rica.
Y aquí es donde se inicia el enredo. Cuando Don Martín va al encuentro de
doña Inés, ésta se ha enamorado de Don Gil, pero de otro don Gil. El problema
que lo único que sabe de él es que viste con unas características calzas
verdes.
Tanto don Martín como doña Inés desconocen que el de las calzas verdes no
es sino doña Juana que despechada por lo ocurrido en Valladolid se ha
disfrazado en busca de venganza.
También desconoce doña Inés que doña Elvira, su nueva vecina a la que se
siente muy unida por su gran parecido con Don Gil, es la misma doña Juana
disfrazada. Me siguen en el enredo….
Y será así como el gran Don Gil de las calzas verdes, o doña Elvira o
quizás doña Juana seguirán engañando y fingiendo, liándolo todo y enredando
hasta conseguir que don Martín vuelva a los brazos de su amada.
Y así Don Gil de las Calzas verdes, doña Elvira o doña Juana
enredarán, engañarán y atormentarán a todo Madrid hasta que don Martín desista
de su empeño y vuelva a los brazos de su prometida… o hasta que acabe
completamente loco.
Dentro de la sencillez de la trama, la obra es muy ingeniosa una mujer
doña Juana es capaz de engañar a todo el mundo creando dos personajes para
vengarse. Ha de pensarse que estamos en 1615 y no sólo el hecho de que una
mujer sea la gran protagonista de toda la trama sino que todos los tejemanejes
que va urdiendo, nos da idea de que Don Gil de las calzas verdes fue una obra
muy adelantada a su tiempo.
Es sin dudarlo uno de las primeras obras cuyo principal por no decir
único protagonista era una mujer. El papel no sólo de doña Juana, sino del
resto de “protagonistas” femeninas está muy por encima de los personajes
masculinos.
La obra nos muestras una de las perspectivas más completas y alejada de
los estereotipos de la época que se produjeron en todo el siglo de oro respecto
a un tema muy frecuente en esa época, el amor y las pasiones humanas.
La versión
de la obra ha sido realizada por Sarah Kane y BrendaEscobedo. Impecable el resultado final manteniendo la esencia
del texto original.
Brenda
Escobedo es dramaturga y ha trabajado con Ernesto Arias en obras como La
enfermedad de la juventud, Dos nuevos Entremeses, El animal de Hungría y El
hospital de los locos. Autora de las dramaturgias y de la dirección de escena
de El diablo mundo, La tumba de Keats y El templo vacío.
En cuanto a
la dirección es obra de la propia Sarah
Kane, directora británica experta en
la obra de Shakespeare. Lo más reseñable es haber repartido el papel principal de
D.ª Juana y sus copersonajes Don Gil y D.ª Elvira entre las actrices Cristina
García, Ania Hernández y Cristina Marín-Miró.
Respecto a
su modo de trabajar Brenda Escobedo señala que “la dirección de Sarah Kane
acierta al jugar con actrices/personajes de una manera divertida y muy
evidente. El desdoblamiento de Doña Juana es escénico, no solo argumental. La
versión tiene la finalidad de subrayar el carácter ágil e impredecible de la obra
y revela la capacidad de un personaje para enfrentarse a las exigencias del
amor, que reclaman ingenio, fantasía y trazas agudas, además de un dominio
lingüístico y poético excepcional”.
Y continúa
indicando “Acierta al jugar con actrices/personajes de una manera divertida
y muy evidente”, expresa la dramaturga. De hecho, es impresionante ver al
elenco recitar el texto clásico y moverse con tanta fluidez y gracia sobre el
escenario. Su expresividad cómica arrancó sonoras carcajadas del público, que
no tardó en sumergirse por completo en la historia”.
En cuanto a
los elementos escénicos utilizados en la obra Kane indica que “como
directora especializada en la dirección de comedias de Shakespeare, me pidieron
que explorara las conexiones entre Shakespeare, que escribía al mismo tiempo en
Inglaterra que Tirso de Molina en España, y la tradición clásica española. Así
que elegí una puesta en escena clásica y un estilo de dirección sencillo,
aunque la escenografía y el vestuario están lejos de ser imitaciones
naturalistas de la vida del siglo XVII realzando con entusiasmo el lado cómico
de Don Gil.”
Elisa Sanz es la responsable de la minimalista y colorida
escenografía compuesta básicamente por una pared móvil que sirve para separar
espacios.
Paloma Parra es la diseñadora de la iluminación, Vicente
Fuentes se ocupa de la voz y la palabra; Sol Garre ha
diseñado la coreografía y el movimiento de los actores; Laura Fernández,
de la alegre composición musical, y Beatriz de la Banda Soriano de
los arreglos y montaje de canciones.
A destacar
el cuidado vestuario obra de PIERPAOLOALVARO un diseño que apuesta
por colores llamativos para reforzar el frenético ritmo de la obra.
En cuanto al
elenco está formado por los actores y actrices de la sexta promoción de la
Joven Compañía Nacional de Teatro Clásico: Íñigo Arricibita, Xavi Caudevilla, Cristina García, Ania
Hernández, Antonio Hernández Fimia, Pascual Laborda, Felipe Muñoz, Cristina
Marín-Miró, Miriam Queba, María Rasco y Marc Servera.
Un trabajo
muy coral de todos ellos donde destaca Miriam Queba como Doña Inés con una
excelente actuación. Impecable también las tres actrices que “comparten”
personajes tanto Cristina García como Ania Hernández y Cristina Marín-Miró,
están simplemente espectaculares.
En definitiva una oportunidad única para poder disfrutar de una de las obras más emblemáticas del siglo de oro español.
Elenco: Iñigo Arricibita, Xavi Caudevilla, Cristina
García, Ania Hernández, Antonio Hernández Fimia, Pascual
Laborda, Cristina Marín-Miró, Felipe Muñoz, Miriam Queba,
María Rasco y Marc Servera.
Producción:
Compañía Nacional de Teatro Clásico.
Escenografía:
Elisa Sanz – AAPEE.
Ayudante de
escenografía: Sofia Lovisa Skantz.
Iluminación: Paloma Parra.
Ayudante de
Iluminación: Víctor S. Bermúdez.
Diseño
vestuario: PIERPAOLOALVARO (Pier Paolo Alvaro y Roger Portal – AAPEE).
Asesor de
verso: Vicente Fuentes.
Intérprete:
Elena Brea Sandín.
Coreografía
y Directora de movimiento: Sol Garre.
Arreglos y
composición musical: Laura Fernández Alcalde.
Arreglos y
montaje de canciones: Beatriz de la Banda Soriano.