Teatro: Mi abuela no se llama Carmen. Teatro Fernán Gómez (Sala Jardiel Poncela)
Nueva temporada del Teatro Fernán-Gómez
El pasado Martes 4 de Julio se presentó la nueva temporada del Teatro Fernán-Gómez, en la que las mujeres creadoras vertebrarán la programación. A lo largo de los próximos meses volveremos a disfrutar en sus cinco salas de espectáculos de teatro, danza, música o flamenco, a lo que se suman las siempre interesantes exposiciones con las que se completa una muy apetecible programación. Para este año se busca la recuperación de muchas voces silenciadas a lo largo de la historia, por lo que se dará visibilidad a historias de y sobre mujeres creadoras de toda índole. La presentación de la semana pasada contó con la actuación de la compañía Ron Lalá, que ha ofrecido un fragmento del espectáculo que estrenarán en el mes de Diciembre en la Sala Guirau del teatro.

Teatro: Las cartas de Cristian. Teatros del Canal (Sala negra)
Tras el notable éxito de sus dos anteriores trabajos, la sala negra de los Teatros del Canal nos trae las Cartas de Cristian, la última obra de Antonio C. Guijosa.
La obra comienza viendo como Cristian recibe un premio.
En la fiesta posterior sale a la terraza para tomar el aire y se encuentra con
Maggie, publicista que le da una serie de pautas y consejos fruto de que ha leído
todos los libros de autoayuda que han caído en sus manos.
Teatro: Con A mayúscula. Teatros Luchana.
Hay temas que no por mucho que se hable de ellos dejan de avergonzarnos. Las pequeñas piezas que componen esta obra son necesarias, porque es el día de hoy que sigue existiendo una desigualdad enorme entre los hombres y las mujeres, por mucho que algunos no quieran verlo. Pero esto es aún más grave cuando no solo hablamos de desigualdad, sino que profundizamos en algo tan demencial como el abuso. Por todo ello siguen siendo muy necesarias este tipo de obras, para seguir reivindicando que aún hay gente que sigue asociando el querer a alguien con la posesión, porque los hay que ven a una chica sola volviendo a casa y piensan en sobrepasarse con ella, porque en el siglo XXI sigue habiendo un gran negocio en la prostitución y la mercantilización del cuerpo de la mujer sin su consentimiento.

Teatro: Solo a un metro de distancia. Sala Cuarta Pared
La vida puede llegar a ser un camino angustioso en el que duele cada día. El dolor infringido en la niñez es muy difícil de olvidar, y en esta pieza se nos muestra con una delicadeza precisa y portentosa, que nos tiene en vilo durante toda la historia, desgranando poco a poco el dolor y las heridas que son casi imposible que cicatricen. La vida puede doler, la realidad puede angustiar, los recuerdos pueden asustarnos, todo aquello que marcó a la persona que fuimos puede quedar marcado en lo más profundo de nuestra alma, por mucho que intentemos escondernos y por muy cercano que haya sido el daño infringido.